En esta ocasión soy una mera espectadora. Mi madre, que es una gran cocinera y repostera, prepara todos los años esta receta tan tradicional en Córdoba en el día de Todos los Santos. Las Gachas Tradicionales es un postre sencillo y delicioso preparado a base de leche o agua, harina, aceite y azúcar. Además, llevan algunas especias y unos tostones de pan frito.
Cuando a mitad de siglo pasado la comida escaseaba, durante la posguerra, era un postre muy socorrido ya que se preparaba con ingredientes sencillos que no solían faltar en las despensas de los hogares andaluces. Mi madre cuenta que mi abuela las hacía con agua en lugar de leche (ya que ésta no era tan asequible, salvo que en casa hubiera alguna vaca), y que a ella le sabían a gloria.
| Raciones | Tiempo de preparación |
| 6-8 personas | 10 minutos |
| Tiempo de cocción | Tiempo de reposo |
| 20 minutos | 30 minutos |
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Postre rural típico andaluz del día de Todos los Santos (1 de Noviembre). Es una receta sencilla muy antigua que resurgió en la Guerra Civil ante la escasez de comida. Aunque son muchas las variaciones de esta receta tradicional, las gachas dulces se preparan básicamente con harina de trigo, aceite, azúcar y leche o agua. Se suelen condimentan con limón, anis, canela y pan frito.
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- 100 ml aceite de oliva suave
- 1 limón (piel)
- 2 Tbs anís en grano (1 Tbs = 1 cda sopera =15 ml)
- 1 l leche entera
- 1 pizca sal
- 1 rama canela
- 250 g azúcar
- 100 g harina de trigo
- 1 trozo pan del día anterior (del día anterior)
- 200 ml Aceite de oliva (para freir el pan)
- 1 Tbs canela + azúcar (para decorar)
- En una sartén con un par de dedos de aceite de oliva, freímos los trocitos de pan a fuego fuerte hasta que estén dorados y crujientes. Retiramos y dejamos escurrir sobre papel absorbente.
- Ponemos 100 ml de aceite a calentar en otra sartén con la piel de limón para que desprenda todo su aroma y despues de un rato echamos el anís en grano y lo freimos un ratito hasta que sedore ligeramente. Hay que tener cuidado de no quemarlo. Apartamos del fuego y reservamos.
- Calentamos la leche con la mitad del azúcar, la pizca de sal y la rama de canela. Cuando esté tibia echamos dos o tres cucharones en un bol con la harina y el resto del azúcar. Removemos bien hasta que la harina se disuelva por completo y quede una pasta bien homogénea.
- Cuando el resto de la leche comience a hervir colamos encima el aceite reservado y añadimos la pasta de leche harina y azúcar. Bajamos el fuego y removemos continuamente para que no se pegue el fondo de la olla. Cuando las gachas espesen y comiencen a hervir de nuevo apartamos del fuego y las volcamos en una fuente honda o en cuencos individuales.
- Decoramos la superficie con un poco de azúcar y canela en polvo, y ponemos encima los tostones de pan frito. Se pueden tomar templadas o frías.
¡En verdad, que saben a gloria! Os animo a probarlas, seguro que quedaréis encantados.
Nos vemos pronto. Un saludo.
¡Por fin parece otoño de verdad! ¡Qué fresquito hace hoy!
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